A la pregunta de por qué mi perro quiere dormir conmigo se puede responder con varios motivos, todos ellos relacionados con el apego y el vínculo familiar. A continuación, te explicamos las razones, los inconvenientes y la forma más adecuada de asignarle un lugar para él solo.
Razones por las que tu perro solo quiere dormir contigo
Estos son los principales motivos por los que tu perro prefiere dormir contigo.
Los perros son de naturaleza social
En la vida salvaje, los perros suelen dormir en grupo, ya que son animales que necesitan la compañía de otros. De hecho, si convives con más de un perro y tienen una buena relación, es probable que hayas notado que nunca duermen solos. En su mayoría, optan por dormir junto a sus humanos o en la misma cama o habitación, buscando ese sentido de conexión y compañía que encuentran en ti.
Se sienten más seguros
Al dormir cerca de sus humanos, los perros se sienten más seguros y protegidos. La presencia humana les brinda una sensación de tranquilidad y les ayuda a enfrentar posibles situaciones de peligro o estrés durante la noche.
Instinto de protección
El perro, como animal de manada, tiene un fuerte sentido de protección hacia los suyos así que dormir juntos cumple otra función importante: la de protegerse mutuamente. Durante el sueño, tanto los perros como los humanos se encuentran en un estado de vulnerabilidad. Por esta razón, muchos perros eligen dormir cerca de sus dueños o junto a ellos, ya que esto les permite protegerlos en caso de que ocurra algo inesperado.
Vínculo emocional
Si te preguntas por qué mi perro duerme pegado a mí, la respuesta es que te quiere. Los perros desarrollan un fuerte vínculo emocional con sus familiares humanos a través de la convivencia y la interacción diaria. Dormir juntos fortalece este lazo afectivo y promueve un sentido de conexión. El perro se siente parte de la manada familiar y busca la proximidad con sus miembros.
Comodidad y calor
La respuesta a la cuestión de por qué mi perro duerme conmigo puede ser tan simple como que tu cama le parece el lugar más cómodo. Además, al compartir la cama o el espacio de dormir, pueden aprovechar el calor corporal y disfrutar de una sensación acogedora. Esto es especialmente relevante en épocas de frío.
Pros y contras de que tu perro duerma contigo
Dormir con tu perro tiene algunas ventajas, pero también existen inconvenientes, así que es una cuestión que se debe valorar.
Ventajas
- Reducción de ansiedad y estrés. Compartir la habitación y la cama con tu perro puede aumentar los niveles de oxitocina, la hormona responsable de reducir el estrés. Esto puede llevar a una disminución en la producción de cortisol, la hormona relacionada con la ansiedad, lo que da como resultado una sensación general de calma y tranquilidad.
- Mayor sensación de bienestar. El cariño y la compañía que brinda un perro pueden ayudarte a dejar de lado los miedos o las preocupaciones diarias. Al tener a tu perro cerca, es más fácil relajarse y conciliar el sueño, lo que contribuye a una sensación de bienestar general.
- Refuerzo del sistema inmunitario. Estudios han demostrado que los niños que tienen un contacto constante con perros tienen menos probabilidades de desarrollar ciertas enfermedades, como alergias respiratorias y asma.
- Efecto terapéutico. Dormir con tu perro puede ser beneficioso en casos de depresión y ansiedad. La compañía de un perro puede brindar consuelo y apoyo emocional, y ayudar a las personas a lidiar con preocupaciones y tristezas.
Desventajas
- Hábitos de higiene más exigentes. Los perros pasan tiempo en la calle y pueden acumular suciedad y bacterias en su pelaje. Además, sueltan pelo, lo que significa que es necesario realizar una limpieza más frecuente de las sábanas y el edredón.
- Alteraciones en el sueño. Aunque dormir con tu perro puede brindar compañía y confort, también puede afectar la calidad del sueño. Los ruidos y movimientos del perro durante la noche pueden despertarte varias veces, interrumpiendo tu descanso y dificultando un sueño reparador.
- Conflictos en la pareja y con otras mascotas. Cuando decides compartir tu vida con una pareja, la presencia del perro en la cama puede generar conflictos, tensiones o discusiones. Además, si tienes otras mascotas en casa, como gatos, puede haber problemas de territorialidad y posesividad que requieran ajustes y adaptaciones.
- Problemas de comportamiento. Dormir con un perro que sufre de ansiedad por separación o hiperapego puede no ser beneficioso para su bienestar emocional. En estos casos, la dependencia excesiva del perro hacia su dueño puede aumentar si se le permite dormir en la misma cama.
Consejos para acostumbrar a tu perro para que duerma solo
«Mi perro llora porque quiere dormir conmigo» es una de las quejas más habituales. Enseñar a tu perro a dormir en su propia cama puede requerir tiempo y paciencia. Pero hay pautas que puedes seguir para lograrlo. Aquí tienes algunas recomendaciones:
Proporciónale una cama cómoda
Asegúrate de que la cama de tu perro sea cómoda y adecuada para su tamaño y condición física. Debe ser lo suficientemente gruesa para aislarlo del suelo frío, especialmente en invierno. Opta por camas diseñadas específicamente para perros, ya que ofrecen el apoyo y la comodidad necesarios.
Establece una rutina
Crea una rutina consistente para la hora de dormir. Esto ayudará a que tu perro comprenda cuándo es el momento de ir a su propia cama. Establece horarios regulares para acostarse y levantarse, y sé consistente en seguirlos todos los días.
Refuerza el uso de su cama
Anima a tu perro a usar su cama proporcionándole recompensas y elogios cuando lo haga. Puedes ofrecerle golosinas o elogios verbales y caricias cada vez que se acueste en su cama. Asociar su cama con experiencias positivas ayudará a que la vea como un lugar agradable y deseable para descansar. Si intenta subirse a tu cama no lo regañes ni lo empujes de manera brusca, simplemente redirige su atención hacia su propia cama y ofrécele recompensas cuando se acueste en ella.
Sé constante
Mantén las mismas normas en todo momento y sé coherente en el entrenamiento. Si permites que tu perro duerma en tu cama ocasionalmente, esto puede confundirlo y dificultar el proceso de enseñanza. Es importante establecer límites claros y adherirse a ellos de manera constante para que el perro tenga claro lo que se espera de él.
Ahora que ya sabes responder a la pregunta “por qué mi perro quiere dormir conmigo”, puedes comenzar por comprarle una cama confortable que se convierta en su lugar preferido para descansar. Pásate por Hola Mascota y elige la que mejor se adapte a tu amigo peludo.